Cultivo de Árboles Frutales
¿Qué son los árboles Frutales?
Los árboles frutales son aquellos árboles cuyo fruto, sea carnoso o seco, es comestible y destinado a consumo humano a diferencia de cualquier árbol productor de frutos. La fruta proviene de las semillas localizadas en el óvulo de la flor y en su maduración producen la fruta. En este sentido, también se incluyen como árboles frutales los frutos secos.
Partes que componen un fruto
Antes de establecer una diferenciación de los frutales, es necesario aclarar la estructura de la que se compone un fruto proveniente de un árbol frutal. En general contiene la siguiente estructura:
- Pericarpio: Es el ovario fecundado. Se trata de la parte del fruto que recubre la semilla. De fuera hacia dentro, se distinguen 3 capas:
- Epicarpio: Capa externa de protección. Es el equivalente a la piel de la fruta.
- Mesocarpo: Capa intermedia que corresponde a la parte carnosa del fruto.
- Endocarpio: Capa interna del fruto que rodea las semillas, equivalente al hueso.
Tipos de árboles Frutales según las características del fruto
A la hora de establecer una diferenciación entre los tipos de árboles frutales que existen, nos basamos en las características propias del fruto:
- Árboles frutales tiernos con hueso en el interior: En este apartado se engloban aquellos frutales cuya semilla se encuentra en el interior del hueso. Este fruto carnoso se denomina drupa y en este tipo de árboles frutales destacan el cerezo, el ciruelo, el melocotonero, el albaricoquero o el olivo.
- Árboles frutales tiernos con pepitas en el interior: Son los denominados pomos. A diferencia del primero, sus frutos carnosos contiene las semillas en el interior de un endocarpio coriáceo. Los árboles frutales más destacados son el manzano, el peral, el membrillero o el níspero.
- Árboles frutales exóticos: En esta diferenciación se incluyen los frutales con frutos tiernos que poseen una estructura diferente al resto y unas características y apariencias variadas. En este apartado se incluirían los cítricos, entre los que destacan el naranjo, el limonero, la mandarina, el pomelo, la higuera o el papayo y los Árboles frutales Tropicales como el aguacate, el cocotero, el mango o el chirimoyo.
- Árboles de Frutos secos: Este tipo de árbol frutal produce frutos secos y duros y se encuentran protegidos por una cáscara de similar textura. Árboles representativos son el almendro, el pistacho, el nogal, el castaño o el avellano.
En Diciembre de 2023, las plantaciones de frutales no cítricos (frutos secos, frutas de pepita y hueso) alcanzaban 1.285.421 hectáreas de superficie cultivada, 856.790 ha. de secano (66 %) y 428.630 ha. de regadío (34 %). El Almendro, con una superficie de 756.694 ha. es el cultivo frutal más cultivado a nivel nacional. Andalucía, con 291.903 ha., es la región con mayor superficie de frutales seguida de Castilla La Mancha (230.046 ha) y Aragón (162.990 ha.). Granada, con 125.585 hectáreas, es la provincia con más superficie de frutales cultivada.
Fuente: Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Patrón y Variedad del frutal
El árbol frutal está constituido por el patrón o portainjertos que incorpora el sistema radicular a la planta y la variedad, que es la parte aérea de la planta que producirá frutos. Esta conexión se produce a través de un injerto.
Con la combinación o uso del portainjertos y el injerto se pretende obtener un efecto sobre el menor o mayor vigor, resistencia, tamaño y calidad del fruto, resistencia a enfermedades o problemas de suelo, adaptación climática o precocidad en la producción.
¿Cómo plantar árboles frutales?
Una vez seleccionado el tipo de frutal que queremos plantar y dependiendo de su variedad es conveniente seguir unos pasos fundamentales para que la plantación obtenga los mejores rendimientos productivos. Se establecen unos criterios básicos a la hora de realizar el cultivo de árboles frutales:
- Preparación del suelo: Se requiere de un suelo fértil, profundo, bien drenado enriquecido con un abono orgánico y con luz directa del sol para favorecer un apto crecimiento.
- Tipo de clima: la siembra de frutales requieren de una buena cantidad de horas de sol y también de frío. Para conseguir que nuestra especie de árbol frutal elegida prospere hay que tener en cuenta una serie de circunstancias:
- Evitar sembrar en terrenos donde las heladas son constantes; conllevaría el riesgo de deterioro del árbol.
- Evitar cultivar frutales que florezcan en épocas de heladas ya que afectaría al fruto y su calidad.
- Las especies requieren de una cantidad mínima de horas de frío, desde su parada invernal vegetativa, para crecer. Dependiendo de las variedades necesitan una cantidad determinada de horas determinada. Se entiende por una hora de frío una hora por debajo de 7º C.
- Polinizadores: Una gran cantidad de especies requieren de polinizadores para su floración y posterior fruto. Este tipo de polinización puede ser a través de insectos (en su gran mayoría) o a través del viento. En este grupo de frutales se encuentra el peral, el manzano o el cerezo.
- Plantación: Los frutales pueden ser cultivados a raíz desnuda o en maceta, y dependiendo de la elección la época de plantación es distinta, como se detalla en la sección de un árbol frutal como es el almendro. Así, las plantaciones de árboles frutales a raíz desnuda se realiza en invierno mientras que en maceta o cepellón se pueden sembrar en cualquier época del año evitando el frío y calor extremo. En cualquier caso, son los viveros de frutales especializados los que ofrecerán las recomendaciones oportunas para asegurar el éxito de la plantación.
- Riego: Los frutales, al igual que cualquier árbol o planta, y dependiendo de cada variedad requieren de riego controlado siendo especialmente importante en época de floración y posterior maduración del fruto. Un exceso de riego puede provocar una deficiente calidad en el fruto y perjudicar a la raíz.
- Abono: Los frutales requieren de gran cantidad de nutrientes y es a través de materia orgánica como compost, estiércol, cubierta vegetal o fertilizantes que contengan un alto porcentaje de Nitrógeno, Fósforo y Potasio lo que le confiere las propiedades necesarias para mantener fértil el suelo. La mayor demanda de abono se hace patente en época de crecimiento (formación de la semilla, fruto y su maduración).
- Poda: Con el objetivo de conseguir mejorar la productividad del frutal y obtener frutos de calidad, la poda debe realizarse desde el inicio de la plantación para formar la estructura del árbol permitiendo el paso de la luz solar y eliminar ramas para obtener un mayor vigor. La poda debe realizarse en periodo de reposo que se produce en invierno justo antes de la germinación en primavera. Posteriormente, es aconsejable una pequeña poda desde el verano hasta principios de otoño para reducir el vigor del árbol.
En Diciembre del año 2023, en relación a la superficie de frutales cítricos en España arroja unos datos de 303.320 hectáreas de las que 283.230 ha (91%) corresponde a superficie de regadío y 26.010 ha (9%) a secano. La Comunidad Valenciana, con 155.893 hectáreas (51% del territorio nacional) lidera la producción de cítricos. Valencia, la provincia con mayor superficie de cultivo frutal con 88.395 ha. Se estima una producción para la campaña 2023/24 de 5.754.000 toneladas. La naranja dulce, con 2.643.300 tn., es el frutal cítrico con mayor producción lo que supone casi el 46% del total. España es el principal productor de la Unión Europea de cítricos y 6º del mundo.
Fuente: mapa.gob.es
¿Dónde comprar árboles frutales?
Se pueden comprar en Viveros de árboles frutales en los que se incluyen árboles leñosos de frutos secos (almendro, pistacho, nogal, avellano, etc), árboles frutales con hueso (Albaricoquero, Cerezo, Melocotonero, Ciruelo, etc), árboles frutales con pepita (manzano, peral, granado, níspero, etc.) árboles cítricos (naranjo, limonero, pomelo, etc) y árboles tropicales (aguacate, platanero, papaya, lichi, etc.). La planta se puede obtener a raíz desnuda, en maceta o cepellón. El Viverista le asesorará en lo referente a la variedad y portainjertos que mejor se adapte a su plantación agrícola o huerto.
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