1. Almendros en Seto
La Agricultura moderna está en constante innovación de cara a proveer al agricultor de las técnicas y recursos más avanzados para obtener de la plantación de almendros la mayor producción y rentabilidad. Uno de los sistemas de cultivo más utilizados actualmente en el cultivo del almendro es el Almendro en Seto.
1.1 ¿Qué son los Almendros en Seto?
Los Almendros en seto o Almendro superintensivo es una variante del cultivo tradicional del almendro que permite una mayor densidad de plantación con el objetivo de maximizar la producción por hectárea de almendras. Se caracteriza por una disposición de árboles en filas o hileras creando un seto a una distancia uniforme entre ellos de 1 ó 2 metros a diferencia del cultivo tradicional, donde la distancia entre árboles es más espaciada. Dentro de los sistemas de cultivo del almendro este tipo de plantación persigue una mayor eficiencia en la gestión de los recursos y el espacio. El almendro superintensivo de regadío exige una inversión variable con unos costes iniciales que dependen de la ubicación del terreno, clima, variedad, portainjerto, marco de plantación, sistema de riego, maquinaria para poda, recolección y mantenimiento de los árboles que se ven amortizados a partir del tercer y cuarto año con el adelanto de la producción en comparación con la plantación tradicional. Es indispensable realizar un estudio agronómico realizado por un experto con el fin de asegurar el éxito de la inversión.
Los marcos de plantación más utilizados en el cultivo del almendro en seto es de 3-3,5 x 1-1,5 lo que facilita la mayor densidad de plantas (en torno a 2.000 árboles por hectárea) y el acceso de la maquinaria agrícola para su mantenimiento. Las variedades de almendros para cultivo en seto más utilizadas son Penta, Avijor, Lauranne, Vialfas, Soleta, Makako o Guara. Son variedades autofértiles de floración tardía o extra tardía.
2. Almendro en seto en secano
Como consecuencia de la poca producción que ofrece el árbol de almendro en un cultivo tradicional en secano unido al bajo precio actual, se pone en entredicho la viabilidad de este sistema de cultivo.
Sin embargo, en este año 2023 y tras el éxito en las nuevas plantaciones de almendro en seto en secano se abre una nueva vía de siembra de este cultivo leñoso con unas particularidades que se detallan a continuación:
2.1 Almendro en seto autoenraizado
El Almendro en seto autoenraizado, también conocido como autoradicado, presenta una planta de almendro con un sistema radicular más vigoroso y profundo, lo que le permite acceder a la humedad y los nutrientes del suelo. La utilización de la planta de almendro autoenraizado en lugares donde existe escasez de agua adquiere una notable importancia. Sigue conservando su resistencia a la sequía y como nota característica, no necesita de injerto en el portainjertos. Es necesario su propagación “in vitro” en los viveros de planta de almendro. Su precio es más reducido que la planta de almendro tradicional.
En las plantaciones superintensivas de almendro en secano, las copas de los árboles se reducen para limitar las necesidades hídricas de la planta. Ello conlleva una ampliación en el marco de plantación para el almendro en seto secano que pasa a ser de 3,5-4-5 x 1,4-1,5, con una densidad de plantación de unos 1.800 árboles por hectárea aproximadamente.
Su entrada plena en producción se produce en el quinto año, si bien en el tercer año comienza a dar fruto. Las variedades de almendros para secano que mejor se adaptan son las consideradas autofertiles y de floración tardía o muy tardía. Ejemplo de ello son Avijor, Guara, Soleta o Penta.
Los Almendros, como árboles frutales de secano, se benefician de este sistema de cultivo para ofrecer una mayor producción con respecto al sistema tradicional y ahorrar costes con respecto al almendro en seto de regadío.
3. Ventajas del Cultivo del Almendro en Seto
1.- Recolección más eficiente: El cultivo del almendro en seto facilita la poda y recolección mecanizada de almendras reduciendo significativamente los costes de producción, mano de obra y el tiempo requerido para la recolección, lo que hace de este sistema de cultivo más eficiente.
2.- Mejora en la producción y calidad del fruto: El fruto se mantiene en altura evitando plagas y enfermedades consiguiendo una uniformidad en el tamaño de la almendra.
3.- Control del Riego y Nutrientes: En una plantación superintensiva, mediante el uso de un sistema de riego el agua y los nutrientes necesarios se administran de una manera más eficaz, precisa y uniforme favoreciendo su optimización, principalmente en los lugares con mayor escasez de agua.
4.- Adelanto de la Producción: El almendro en seto suele empezar a producir frutos a partir del tercer año lo que se traduce en beneficios destinados a reducir costes de inversión.